El candidato presidencial del Partido Republicano no detalló la existencia de la sociedad Inmobiliaria e Inversiones Padua Limitada, cuyo capital es de casi $ 5 mil millones. El exdiputado es su administrador y controla el 96% de esta firma a través de Inversiones Bavaro SpA, de la cual es su único dueño. Luego de una consulta de La Tercera, desde el equipo del exparlamentario aseguran que «creemos necesario complementar la declaración original». Expertos en transparencia y probidad comentan que la ley tiene un vacío y difieren respecto de la obligación de tener que declarar compañías como ésta, controladas a través de otras personas jurídicas.
* Posterior a la publicación de esta nota, el equipo de Kast especificó que el candidato sí declaró ante Contraloría una vinculación con la sociedad Padua mediante un cargo de administración y que fue catalogada como “reservada” en la versión que subió el portal Infoprobidad. Pese a esa mención, en la declaración original no se explicita el vínculo societario de propiedad que tiene el exdiputado con Padua, ya que una persona puede ejercer como administrador de una inmobiliaria, pero no tener participación en la propiedad de dicha sociedad. “A partir de la consulta de La Tercera, creemos necesario complementar la declaración original y agregar, en esa sección, el detalle de los derechos que se tiene de la sociedad Bavaro en la sociedad Padua Limitada que había sido declarada en otra sección”, habían señalado para esta nota.
En noviembre de 2015, José Antonio Kast Rist llegó junto a su señora, María Pía Adriasola, y cuatro de sus nueve hijos hasta la 22º Notaría de Santiago, ubicada en la comuna de Las Condes. La familia hizo una modificación relevante a una de las sociedades que en ese tiempo formaban parte del holding Bavaria.
La firma que escogieron fue una creada por los Kast Rist en 1998 y que recibió como primer nombre Cafetería Las Condes Limitada. En 2008 esa misma sociedad tuvo un cambio de razón social y pasó a llamarse Farmacia Suiza Limitada. Fue recién a finales de 2015 que la compañía salió del holding creado por Christian Kast Rist para transformarse en la sociedad principal del clan Kast Adriasola.
El nombre escogido fue Inmobiliaria e Inversiones Padua Limitada. Desde su primer día de existencia, esta sociedad fue controlada por el exdiputado y ahora candidato presidencial del Partido Republicano. En la escritura pública donde quedó registrada esta modificación se lee que el objetivo de la sociedad es el siguiente: “El objeto de la sociedad será la adquisición, enajenación, comercialización, arrendamiento, subarrendamiento u otra forma de explotación, loteo, subdivisión, construcción y urbanización de bienes raíces, por cuenta propia o ajena”.
El capital inicial de esta sociedad fue de $ 200 mil y José Antonio Kast Rist quedó controlando el 97,5%. Su esposa y sus cuatro hijos tuvieron, cada uno, el 0,5% restante.
A fines de 2015 el actual abanderado presidencial ya había tomado la decisión, junto con su hermano Christian, de retirarse del holding Bavaria. Ese año el exparlamentario realizó ocho operaciones para vender su participación en las pocas firmas de las cuales aún seguía siendo socio.
La venta más relevante la hizo cuando abandonó el 0,4% que le quedaba en Inmobiliaria San Miguel Limitada. El exmilitante UDI acordó que su salida del holding sería compensada, principalmente, con la venta de su participación en dicha compañía. “Los socios de Inmobiliaria San Miguel Limitada acuerdan y autorizan a don José Antonio Kast Rist para que en su calidad de socio realice un retiro por $ 4.100 millones, suma que será reinvertida en una sociedad de su control”, se lee en una escritura que registró este movimiento el 29 de diciembre de 2015.
Un día después, José Antonio Kast Rist llevó todo ese dinero y lo inyectó en Padua Limitada. En esa modificación la firma pasó de un capital de $ 200 mil a uno de más de $ 4.200 millones. Pese al aumento, no se modificó la estructura de la propiedad, ya que el candidato conservó su posición de controlador con el 97,5%.
La relación entre JAK, Bavaro SpA y Padua Limitada
El 13 de agosto de 2018, el clan Kast Adriasola realizó una operación relevante. Los socios de Padua Limitada constituyeron sociedades por acciones de las cuales cada uno de ellos es el único socio. Luego se retiraron de Padua como personas naturales, pero ingresaron a la sociedad a través de sus nuevas personas jurídicas.
En el caso de José Antonio Kast Rist esto se traduce en que constituyó la firma Inversiones Bavaro SpA, sociedad de la cual es el único socio. De esta manera, el exdiputado UDI se retiró de Padua como persona natural, pero inmediatamente volvió a ingresar como Bavaro SpA. Esta última firma sí está declarada por el candidato.
Ese mismo esquema se ha mantenido en el tiempo. El último registro que se tiene de esta sociedad tiene fecha de 15 de junio de este año. Ahí entraron a la sociedad otros tres hijos del exdiputado que ahora son mayores de edad. De esta forma el líder del Partido Republicano -ahora representado como el único dueño de Inversiones Bavaro SpA- mantuvo su posición de controlador de la sociedad, esta vez siendo el dueño del 96% de la firma.
Su esposa y sus siete hijos siguieron cada uno con el 0,5% restante. Con estos nuevos ingresos, la inmobiliaria quedó con un capital de $ 4.900 millones.
Esto no significa que el capital de las sociedades que controla José Antonio Kast Rist sean lineales y se puedan sumar. Hacerlo sería un error. De lo que se sabe, todo apunta a que el capital de Bavaro SpA, que sí está declarado, sea el mismo que compone el 96% de Padua. Es decir, el capital de Bavaro SpA paga el capital en Padua.
Ese es el origen de la sociedad principal de José Antonio Kast Rist que, hasta ahora, no está explicitada en su declaración de patrimonio e intereses como candidato presidencial disponible en Infoprobidad.
En la declaración del exdiputado no se incluye ninguna propiedad a su nombre. Según el rastreo de este medio eso sería efectivo. Sin embargo, de acuerdo a esa misma búsqueda, Padua Limitada tiene al menos ocho propiedades. De acuerdo a información del Servicio de Impuestos Internos, la suma del evalúo fiscal de esos bienes raíces es de un total de más de $ 1.081 millones.
Fuente: LATERCERA.COM